Ingerir una cantidad demasiado elevada de metales pesados puede ser tóxica, por lo que estos análisis pueden garantizar que el producto está dentro de los niveles reglamentarios.
Introducción
Los metales pesados, según la definición común de metales con una densidad superior a 5g/cm3, pueden ser absorbidos por la planta de cáñamo en la naturaleza porque algunos son componentes naturales de nuestra corteza terrestre. La cantidad absorbida por la planta de cáñamo depende de las condiciones del suelo y del método de cultivo. Algunos de estos metales pesados son indispensables para el cuerpo humano: oligoelementos como el hierro y el zinc. Son importantes, por ejemplo, para el metabolismo. La ingestión de cantidades demasiado elevadas de estos oligoelementos puede ser peligrosa y tóxica para el ser humano.
El análisis de metales pesados puede servir para determinar si éstos sólo están contenidos en el producto en cantidades inofensivas. La muestra que se va a analizar suele destruirse hasta tal punto que los metales pesados quedan libres en la solución. A continuación se miden los elementos. El Reglamento CE 1881/2006 se encarga de fijar el nivel máximo de contaminantes en la UE.
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